Poznań, la capital de Polonia Mayor
Capital de la Polonia Mayor, gracias a su localización en la mitad de la ruta entre Berlín y Varsovia, es conocida sobre todo por su gran actividad comercial e industrial, y sus ferias. ¡Pero no te dejes engañar! La cuna del estado de Polonia se encuentra precisamente en la franja oeste del país y tanto Poznań, como Wroclaw (a 180 km) conservan monumentos que avalan la milenaria historia del país.
Quizás por esa razón, habría que incluir en la visita el paseo a la parte más antigua que se encuentra en Ostrów Tumski, una isla con edificios principalmente eclesiásticos (la catedral) entre dos brazos del río Warta que recorre la ciudad. Caminando o viajando en tranvía hacia la parte más moderna nos adentraremos en otro ambiente. En el casco histórico de la ciudad no puede faltar la Plaza de Mercado cuyo edificio principal, el Ayuntamiento, nos recuerda los mejores ejemplos de la arquitectura renacentista italiana. El Ayuntamiento ocupa la parte central de la plaza „flanqueada” por casas burguesas o antiguos puestos de venta del mercado original que fue el lugar: la variedad de colores y formas arquitectónicas lo convierten en un espacio alegre, elegante y afable. Además, en la propia plaza o en las calles aledañas se encuentran museos que visitar, sin perderse la cita con los cabritos. Es una tradición en Poznań acudir al Ayuntamiento a mediodía y ver cómo, gracias a un antiguo mecanismo, las figuras de los cabritos dan la hora en lo alto de la torre del ayuntamiento.
Entre los monumentos más „jóvenes” se encuentra el Castillo Imperial, de estilo neorrománico, construido a principios del s. XX y hoy convertido en el Centro de Cultura Zamek más significativo de la ciudad. Alberga interesantes exposiciones temporales de arte que cualquier viajero con intereses culturales debería tener en cuenta.
Poznań siempre ha sido una ciudad con espíritu innovador: una antigua fábrica de cerveza, el Stary Browar del s. XIX, se convirtió, hace algunos años, en un moderno centro comercial y cultural, conservando la estructura principal del edificio original. El diseño y las soluciones tecnológicas que se habían adelantado a la filosofía de un mundo más sostenible, recibieron varios premios internacionales. Otro ejemplo del emprendimiento e innovación es el recinto ferial internacional, Targi Poznańskie. Tanto la propia iniciativa de crear una institución ferial, que data de 1921, como los edificios del recinto cuentan con mayor tradición en el país y en esta parte de Europa.
Otro espacio recomendado, de reciente creación, es el Enigma. Sí, sí, se trata del hecho fundamental para el desenlace de la II GM: tres matemáticos de Poznan dieron el primer paso para quebrar el código Enigma ideado por los nazis para conseguir victoria final que, afortunadamente, no se produjo. La exposición se encuentra en el Castillo Imperial, actualmente el Centro de Cultura Zamek.
Además de innovadores y emprendedores, los habitantes de Poznań son muy fieles a sus tradiciones, que hay muchas. Su patrono es San Martín que comparte el día festivo con el de la Independencia (el 11 de noviembre), día de procesiones, ganso asado relleno a la hora de la comida y el Cruasán de San Martín (producto regional) que incluso tiene su propio museo. Estas tradiciones, junto con el innovador Festival Internacional de Escultura en el Hielo, están presentes en el mercadillo de Navidad, llamado El Belén de Poznań (Betlejem Poznańskie), elegido como uno de los mejores eventos navideños en 2021 por European Best Destination.
Como en cualquier otra urbe polaca, tampoco aquí faltan espacios verdes. Destaca el Parque de la Ciudadela (Cytadela) y el lago artificial Malta, con muchas posibilidades de practicar deportes al aire libre, sin dejar de lado la posibilidad de disfrutar de aguas geotermales en las Termas de Malta (Termy Maltańskie). Junto con Varsovia y Cracovia, es la tercera ciudad del país, y una de las pocas en Europa, que tiene a sus puertas un parque nacional: el de Wielkopolski (Parque Nacional de Polonia Mayor). Entre las excursiones desde Poznań, se puede incluir también la visita a los palacios de Kórnik o Rogalin, sedes de las familias aristocráticas de la región.
Poznań tiene aeropuerto internacional y en temporada alta hay vuelos directos desde España. La ciudad está bien conectada en tren y por carretera con Varsovia (300 km), Berlín (260 km), Wroclaw (180 km) y Toruń (150 km) para confeccionar un „viaje de autor”.
Más información en Visit Poznan y en artículos adicionales publicados abajo.