Rutas subterráneas

Las rutas subterráneas en Polonia es la marca del país: las hay muchas y de diferentes características, desde antiguas minas hasta los túneles fortificados de la II Guerra Mundial (donde, por cierto, sigue escondido el famoso tren con oro robado). Todo depende del interés de cada uno pero en casi cada región de Polonia existe algún lugar subterráneo que visitar.

Nuestro recorrido por los tesoros ocultos bajo tierra debe empezar por la Mina de Sal Wieliczka, a 12 km del centro de Cracovia, y para muchos viajeros visita obligada en Polonia, Cuenta con más de 700 años de historia y un atractivo recorrido a más de 100 m de profundidad. Es una maravilla a escala mundial y todo un mundo subterráneo hecho de roca salina y sal pura. Lo más impresionante, La capilla de Santa Kinga donde los bajorrelieves y hasta las lámparas de telarañas son de sal. Junto con la Mina Bochnia, a 27 km, Wieliczka fue incluida en la primera lista de Patrimonio de la Humanidad en 1978. La visita se realiza con guías en varios idiomas, español incluido.

La vecina región de Silesia era famosa por la extracción del carbón. Esta industria va desapareciendo poco a poco pero algunas minas, hoy no explotadas, se han convertido en monumentos de la técnica minera y guardianes del trabajo y las tradiciones de los mineros. En la ciudad de Zabrze se puede visitar La Mina de Carbón Guido y Luiza.

El subsuelo silesiano es rico también en metales nobles y minerales. La Mina de Plata, Plomo y Zinc, incluida en el Patrimonio Mundial en 2017, se encuentra en Tarnowskie Góry y una parte de la visita se realiza en barquitos. Lo que destaca en este monumento de la UNESCO es el sistema hidrológico diseñado con tal precisión que es imposible que el agua inunde la mina. Como en cualquier espacio a cierta profundidad, la temperatura del ambiente es igual durante todo el año, aunque precisamente aquí no sube a más de 10º. Se puede visitar con guía (en inglés) y en español bajo petición. La capital de la región, Katowice, se encuentra a 30 km.

Desde Silesia viajamos a la vecina Baja Silesia, en la parte suroeste del país, que nos ofrece la visita a una Mina de Oro en la localidad cuyo nombre alude a este metal: Złoty Stok (Pendiente Dorada). Aquí tenéis la única cascada subterránea de Polonia junto a un asentamiento minero medieval, un espacio sin igual en Europa. La mina es, además, un lugar donde divertirse y aprender dando paseos en barco bajo tierra, bateando oro o fundiendo lingotes.

Recorrido los túneles de la Segunda Guerra Mundial

La región, vecina de Alemania, fue utilizada por Hitler para construir un sofisticado sistema de túneles en los que se perdió un tren que supuestamente estaba cargado con tesoros y oro robados en los países ocupados por los nazi. Los aventureros actuales lo siguen buscando y a veces salta la noticia de su inminente descubrimiento, pero hasta la fecha no se ha encontrado. Parte de estos túneles pueden ser visitados en el Castillo de Książ, hoy un barrio de Wałbrzych. También recomendamos la visita a la Ciudad Subterránea de Osówka, de la época de Hitler. Las visitas son posibles en español.

Hay muchos más monumentos de este tipo en Polonia: la zona fortificada de Międzyrzecze, en la zona fronteriza con Alemania, llamada MRU. La visita no es posible durante la época de la hibernación de los murciélagos que han encontrado aquí un hábitat perfecto. El búnker de Hitler „La guarida de lobo” se encuentra en la otra punta de Polonia, en la región de noreste de Warmia y Masuria; éste fue el lugar del atentado contra Hitler, hecho contado en la película Valkiria.  

Para los amantes de las ciencias geológicas, las rutas por las grutas de las montañas de las más antiguas de Europa, Swietokrzyskie (Montañas de Santa Cruz), o más al sur en los Tatra, serán una tentadora propuesta. Visitando las Montañas de Santa Cruz, merece la pena la Mina neolítica de Kamionki Swietokrzyskie, que también es Patrimonio de la UNESCO o en la capital de la región, Kielce, la visita a su Geoparque (UNESCO).