Sabroso otoño
El final del verano y el principio del otoño vienen marcados por fiestas que celebran las buenas cosechas (Dożynki).
Se organizan en pequeñas localidades de regiones agrícolas, no siempre cerca de los circuitos turísticos más habituales. Por eso recomendamos visitar los principales mercados de las ciudades, para dejarse envolver por los aromas de las frutas y verduras de temporada, para admirar sus colores y, cómo no, probar sus sabores.
Como Polonia es un país tradicionalmente agrícola, alrededor de las ciudades hay muchas granjas que llevan diariamente sus productos a sus mercados, algunos en edificios históricos y otros al aire libre. Más abajo os recomendamos algunos.
Al comprar el género, merece la pena tener en cuenta que Polonia es una gran productora de frutas como la manzana, la ciruela, la pera, la grosella (en su variedad roja y negra), la uva-crispa, el arándano, la fresa y la frambuesa.
En otoño, las setas se convierten en las protagonistas, siendo la base de muchos platos. Es la mejor época para atreverse con un plato de chantarelas frescas o boletus como producto base para salsas que acompañen carnes, pescados o pastas.
En los mercados también se venden embutidos y quesos regionales elaborados en pequeñas granjas, así como mieles y encurtidos, entre los cuales destacan los pepinos y la col. En ninguno faltarán flores frescas, para poder mantener la costumbre de tener siempre algunas en casa. Para conseguir el mejor género se recomienda hacer las compras por la mañana. Estos espacios comerciales suelen cerrar los sábados por la tarde y los domingos.
Principales mercados de frutas y verduras:
Cracovia
Kleparz es un mercado situado prácticamente a las puertas del casco antiguo de la ciudad, ubicado en Rynek Kleparski.
Wroclaw
Su Hala Targowa también queda muy próximo a la zona monumental de la ciudad y, además de ser un lugar para comprar verduras y frutas frescas, sirve de parada para un buen número de turistas.
Gdansk
En la plaza Dominikanski se encuentra este mercado tradicional gracias al cual los agricultores de la región de Gdansk pueden vender sus productos en la ciudad. Relativamente pequeño, permite comer un tentempié sano y saludable, ya que predomina la fruta y la verdura.
Varsovia
Muchos barrios de Varsovia tienen su propio mercado, aunque el más céntrico y apreciado es Hala Mirowska. En este edificio de finales del siglo XIX se puede encontrar prácticamente de todo, desde trufas (aunque hay que buscar bien, porque apenas hay uno o dos puestos que las venden) hasta incluso huevos de gallinas criadas con música clásica. No es extraño encontrarse con algún que otro influencer gastronómico. Se dice que las mejores flores frescas de la ciudad se venden aquí. Los fines de semana desde la primavera al otoño, los granjeros de la zona de Varsovia también acuden a los llamados „mercados de desayuno”, donde varsovianos y turistas pueden desayunar tranquilamente productos frescos de proximidad.
